NUEVA YORK.- El
presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, abordó hoy en Nueva York con
autoridades de la industria de turismo y la Cámara de Comercio de EE.UU.
las posibilidades de atraer visitantes estadounidenses a la isla a
pesar de las restricciones impuestas por Washington.
Díaz-Canel
trató con sus interlocutores del país norteamericano "las
potencialidades" para las compañías que se dedican a los viajes entre
ambos países, informaron medios estatales de La Habana.
En
la reunión también se debatió "la necesidad de que se eliminen las
prohibiciones que impiden a los norteamericanos visitar la nación vecina
libremente", indicaron los medios.
Más
de 430.000 estadounidenses visitaron Cuba entre enero y septiembre de
este año, lo que supone un retroceso de aproximadamente el 20 %
interanual, según datos oficiales publicados hoy.
La
caída en los viajes se atribuye al restablecimiento de la prohibición a
los viajes individuales en la categoría "pueblo a pueblo" -permitidos
por la anterior Administración de Barack Obama- y los incidentes de
salud sufridos por diplomáticos de EE.UU. en la isla cuyas causas aún no
se han determinado.
Esto
se suma a las medidas decretadas por Trump para endurecer el embargo,
como la prohibición a ciudadanos y empresas estadounidenses de realizar
transacciones o negocios con entidades vinculadas al estamento militar
cubano, entre las que figuran decenas de hoteles y otras compañías de
servicios turísticos.
Uno
de los principales resultados del "deshielo" bilateral fue el
restablecimiento en 2016 de los vuelos comerciales directos entre EE.UU.
y Cuba, donde comenzaron a volar las principales aerolíneas de ese
país, entre ellas American Airlines, Delta, United o Southwest.
El
presidente cubano, que se reunió con los directivos estadounidenses de
comercio y turismo en el marco de la Asamblea General de la ONU en Nueva
York, destacó que "la industria de viajes es un sector que favorece el
diálogo y las relaciones con Cuba", según los medios estatales.
Díaz-Canel
indicó a sus interlocutores que en Cuba operan actualmente más de 20
cadenas hoteleras que gestionan unas 25 mil habitaciones y citó estudios
de mercado al asegurar que, de no ser por el embargo, la isla podría
recibir cada año a entre dos y cinco millones de turistas
estadounidenses.
El
turismo es la segunda fuente de ingresos del Estado cubano, un sector
vital para el país, que atraviesa importantes problemas de liquidez.
En
la víspera, el mandatario cubano también abordó el asunto del embargo
con el Consejo Nacional de Iglesias de los Estados Unidos, cuyos líderes
le apoyaron en la causa de pedir el levantamiento de las sanciones
financieras de Washington y normalizar las relaciones entre ambos
países, según los medios de La Habana.
Con
motivo de su participación en la Asamblea General de la ONU, el
presidente de Cuba ha mantenido más de una veintena de encuentros con
líderes políticos y sociales, así como con sus homólogos de varios
países, entre ellos España o Argentina.