LA HABANA.- Más de 1,4 millones de cubanos
trabajan en el sector privado de la isla, donde aún son empleados del
Estado más de tres millones del total de 4.482.700 personas ocupadas en
el país, revelan estadísticas del Ministerio de Trabajo publicadas este
sábado en la prensa oficial cubana.
A fines de 2018
la tasa de desempleo se sitúo en un 1,7 %, informó la titular de
Trabajo, Margarita González, al presidente cubano Miguel Díaz-Canel,
durante una reunión del Consejo de Ministros celebrada a inicios de
semana y reseñada hoy en el diario estatal Granma.
El número de empleados fuera de las entidades del Estado
incluye, entre otros, a quienes trabajan en cooperativas agrícolas, a
los beneficiarios de tierras otorgadas en usufructo por el Gobierno y a
los trabajadores por cuenta propia, que sumaban unos 588.000 a fines de
2018, casi el cuádruple de los registrados en 2010.
En Cuba, donde viven más de 11,1 millones de habitantes, los llamados cuentapropistas ya representan el 13 % de la población.
La reducción de las nóminas estatales estuvo entre las primeras medidas
del plan de reformas iniciado hace casi una década por el entonces
presidente Raúl Castro, que promovió la ampliación del trabajo privado
como una alternativa para los despedidos del sector público.
Poco tiempo después de llegar al poder en abril pasado, la nueva
Administración de Díaz-Canel comenzó un proceso de "reordenamiento" del
cuentapropismo, para lo que paralizó la entrega de nuevas licencias
durante más de un año y anunció un paquete de medidas restrictivas que
no fueron bien recibidas por los isleños.
El malestar
entre los "cuentapropistas" cubanos hizo que el Gobierno diera un paso
atrás el pasado diciembre y suavizara su posición en el último momento,
reconociendo el poder del sector emergente en el destino económico del
país.
La ministra cubana de Trabajo precisó que el 61
% de los ocupados de la isla tiene 40 años o más, una "tendencia que no
se recupera a corto plazo y es causa del alto grado de envejecimiento"
del país.
El 52 % de los cubanos empleados tiene un
título universitario, agregó la titular, que reconoció que entre los
principales problemas del empleo estatal está "el impacto negativo del
salario como vía fundamental para satisfacer las necesidades".
En Cuba el salario promedio estatal no supera los 30 dólares al mes,
ingresos que no cubren el elevado costo de la vida en la isla, a pesar
de que el Estado subsidia servicios como la salud, la educación y aún
vende un grupo de alimentos a precios simbólicos a través de una
cartilla de racionamiento cada vez más reducida.
El
Consejo de Ministros celebrado a inicios de esta semana analizó también
temas relacionados con la protección del ciberespacio, la inversión
extranjera, las exportaciones y la marcha de la economía al cierre de
2018, cuando el Gobierno afirmó que la isla creció un 1,2 % frente al 2 %
estimado inicialmente.