domingo, 11 de noviembre de 2018

Las oficinas electorales de Florida comienzan con el recuento

MIAMI.- Los empleados de los entes electorales en los 67 condados de Florida iniciaron este domingo, aunque algunos comenzaron el sábado, la tediosa tarea de volver a contabilizar las papeletas de votación, tras la orden del secretario de Estado, Ken Detzner.

“Esta es una tarea monumental que sin duda será acabada“, dijo la supervisora electoral del condado de Miami-Dade, Christina White, cuya oficina deberá recontar más de 800.000 cartillas de votación, según recoge el diario Miami Herald.
Los trabajadores del Departamento Electoral del Condado de Miami-Dade, el más poblado de Florida, iniciaron el recuento el sábado, poco antes de las 6 de la tarde, hora local (23.00 GMT), tras comprobar el funcionamiento de los escáner donde serán pasadas las papeletas.
White prevé turnos rotativos a lo largo de jornadas de 24 horas a fin de alcanzar la fecha límite del 15 de noviembre, de acuerdo a la orden firmada la tarde del sábado por Detzner.
Tras recibir los resultados finales de los 67 condados de Florida, el tercer estado más poblado de EEUU, Detzner mandó al recuento las más de 8 millones de cartillas de votación sufragadas en las elecciones intermedias, celebradas el pasado martes, debido a las ajustadas diferencias en algunas contiendas, entre ellas las de senador federal y gobernador.
La ley de Florida establece la obligatoriedad de volver a contar todos los votos cuando la diferencia entre dos candidatos es de 0,50 puntos o menos al finalizar el escrutinio, e incluso obliga a contarlos manualmente si es de 0,25 puntos o menos.
Autoridades de condados en la Bahía de Tampa, al oeste de Florida, como Pinellas y Hillsborough, anunciaron que empezarán este domingo el recuento de votos, en lo que es una situación inédita en la historia Florida, donde no se recuerda una nueva contabilidad en simultáneo en más de una carrera electoral.
La situación rememora la elección del año 2000, cuando un recuento en Florida otorgó la victoria al candidato a presidente George W. Bush, por 537 votos por encima del demócrata Al Gore, y ello le dio al republicano la Presidencia de EEUU.
En el caso de la carrera al Senado, el margen es de 12.562 votos a favor del republicano Rick Scott, apenas el 0,15 % por encima del demócrata Bill Nelson, quien aspira a la reelección.
“El senador Nelson está tratando de cometer fraude para ganar esta elección”, ha afirmado este domingo Scott, sin ofrecer ninguna prueba, durante una entrevista que ofreció a la cadena conservadora Fox y en la que calificó de “mal perdedor” a su oponente.
El candidato y saliente gobernador estatal ha visto reducir la brecha que mantenía con Nelson de unos 80.000 votos que le dieron las proyecciones la noche del martes hasta los 12.500 determinadas conforme el conteo de votos avanzaba.
En sus acusaciones, Scott muestra sintonía con el presidente Donald Trump, quien también en su cuenta de Twitter aludió el sábado a un “robo” en las elecciones en Florida, de igual manera sin ofrecer pruebas.
El candidato republicano señaló que ha pedido que observen el proceso tanto a la Secretaria de Estado de Florida como al Departamento de Cumplimiento de la Ley de Florida, entidades que hasta el sábado señalaron no haber hallado indicios de fraude o hecho delictivo y, por ende, no hay investigación en curso.
Nelson, por su parte, se mantiene en la necesidad de que todos los votos se cuenten de manera completa y justa.
Otra de las contiendas que irá a un recuento es la de gobernador estatal, en la que el republicano Ron DeSantis se ha impuesto por solo 33.584 votos, es decir el 0,41 %, a su inmediato rival, el demócrata Andrew Gillum y quien la noche del martes llegó a conceder su derrota.
“Reemplazo mi temprana concesión con una llamada sin remordimientos e inflexible a que se cuenten cada uno de los votos”, declaró Gillum, actual alcalde de Tallahasse, la tarde del sábado en una rueda de prensa.
DeSantis, por su parte, en una declaración en video dijo que los resultados del proceso del martes fueron “claros e inequívocos” y que él se mantiene trabajando para ser el próximo gobernador de Florida, no obstante felicitó a los supervisores electorales, observadores y empleados por su trabajo de cara a que “todos los votos legales sean contados”.

La aerolínea estadounidense 'JetBlue' abre una nueva ruta entre Boston y La Habana

LA HABANA.- La aerolínea estadounidense JetBlue, la primera compañía de Estados Unidos en operar vuelos comerciales a Cuba en 2016 después de más de 50 años, abrió este fin de semana una nueva ruta directa entre la ciudad de Boston y La Habana, informan hoy medios estatales de la isla.

JetBlue es ahora la única aerolínea que ofrece un servicio directo entre Cuba y Nueva Inglaterra (noreste de Estados Unidos), región de los EEUU que abarca los estados de Maine, Nuevo Hampshire, Vermont, Massachusetts, Rhode Island y Connecticut.
Este nuevo vuelo estrenado por 125 pasajeros este sábado cubrirá cada semana la ruta entre el aeropuerto internacional Logan de Boston y la terminal Jose Martí, en La Habana y se suma a los que opera la aerolínea desde Nueva York, Fort Lauderdale y Orlando.
Además de los vuelos a La Habana, Jet Blue opera en las ciudades de Santa Clara (centro) y las orientales Camagüey y Holguín con servicio diario desde el aeropuerto internacional de Fort Lauderdale-Hollywood, en la Florida.
La directora de Aeropuertos Internacionales de JetBlue, Giselle Cortés, resaltó que la aerolínea es la única que ofrece este servicio a Cuba en la actualidad, lo que la convierte además en la primera que conecta a la capital cubana con cuatro ciudades estadounidenses.
"Estamos comprometidos con esta bella isla a largo plazo. Conectar a las familias y a las personas significa mucho para nuestra empresa", afirmó la directiva al participar en el vuelo inaugural de la nueva ruta.
Asimismo señaló que la compañía busca también inspirar a otras aerolíneas y empresas a tomar esta misma postura hacia Cuba, según cita un reporte de la estatal Agencia Cubana de Noticias.
JetBlue operó el 31 de agosto de 2016 el primer vuelo regular que conectó a Cuba y EEUU desde 1963, y reabrió así las rutas aéreas entre ambos países, uno de los principales avances tras la reanudación oficial de los vínculos diplomáticos en julio de 2015, bajo la administración de Barack Obama.
En virtud de ese acercamiento, Washington autorizó los vuelos a la isla de ocho aerolíneas estadounidenses, entre ellas, United Airlines, Southwest, Silver Airways, Spirit, Alaska Air Group, Delta y Southwest, aunque algunas de ellas han suspendido sus rutas al país caribeño al no lograr la demanda esperada.
Aunque los estadounidenses todavía no pueden viajar a Cuba como turistas debido a las restricciones que impone el embargo de Washington sobre la isla, sí pueden hacerlo si se acogen a alguna de las 12 categorías de viaje autorizadas tras la flexibilización de algunas restricciones que aprobó Obama.
No obstante, tras su llegada a la presidencia de EEUU, Donald Trump ordenó un endurecimiento de la política hacia Cuba que prohíbe los viajes individuales de estadounidenses a la isla, entre otras medidas restrictivas que han supuesto un retroceso en la relación bilateral.