MIAMI.- El destacado cineasta cubano Juan Padrón, creador de Elpidio Valdés y Vampiros en La Habana, falleció este martes 24 de marzo en la capital cubana víctima de una dolencia pulmonar. Tenía 73 años de edad.
“Nuestro amado padre Juan Padrón acaba de pasar a
la posteridad a las 5:20 a.m. de hoy día 24 de marzo de 2020. ‘El
último mambí’ batalló durante 20 días y se va lleno de amor y
tranquilidad. Agradecemos a todos los médicos, amigos y admiradores que
durante estos días han mostrado su cariño y admiración por este gran
artista que es parte ya de la cubanía y la independencia de Cuba”,
expresó su hijo, el cineasta Ian Padrón, a través de su cuenta de
Facebook.
“Papi, sé que dirías “no te pongas tan serio”.... y tienes
razón. Te recordaremos siempre como el ser humano más simpático, humilde
y genial que conoceremos en nuestras vidas. Gracias por Elpidio Valdés,
por los Vampiros en La Habana y por sobre todo ser un padre y esposo tan noble y amoroso. !Hasta la vista , compay!”
Nacido en el poblado de Carolina, en Matanzas, Padrón se graduó de
Historia del Arte en la Universidad de La Habana en 1978, cuando ya
laboraba en los Estudios de Animación del Instituto Cubano del Arte e
Industria Cinematográficos (ICAIC).
Gracias a su destreza como dibujante, desde muy joven comenzó a
colaborar como caricaturista en varias revistas de la isla, donde dio a
conocer al samurai Kashibashi y al extraterrestre Barzum, entre otros
personajes.
De su paso por el semanario humorístico El sable se recuerda su dominio del humor negro y su capacidad de crear historias protagonizadas por vampiros.
Pero no fue hasta la década de 1970 en que
aparecería su personaje más famoso, Elpidio Valdés, un ingenioso mambí
que lucha contra poder colonial español, que desde el primer momento le
robó el corazón tanto a grandes como a chicos.
A Padrón se le debe el primer largometraje de dibujos animados en la historia del cine cubano, Elpidio Valdés (1979) y un sinnúmero de cortos entre los que se destacan N’Vula y ¡Viva Papi!, además de las series para adultos Filminutos (1980) a la que siguió la exitosa Quinoscopios (1985), en colaboración con el caricaturista argentino Joaquín Lavado (Quino), creador de Mafalda.
A la lista de largometrajes se suman Elpidio Valdés contra dólar y cañón (1983), Vampiros en La Habana (1985), Contra el águila y el león (1996) y Más vampiros en La Habana (2003).
Padrón se destacó por su versatilidad y el rigor
histórico a la hora de concebir sus puestas en pantalla. Sus
investigaciones sobre la historia de Cuba están recogidas en El libro del mambí (1976).
En las últimos años el cineasta se dedicó
asesorar jóvenes talentos y publicar varios volúmenes de sus historietas
y la versión novelada de Vampiros en La Habana.
A largo de su trayectoria Padrón recibió
múltiples reconocimientos. Entre los más importantes figuran el Premio
Nacional de Cine de Cuba, el Premio Nacional de Humorismo y ocho Premios
Coral del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano. Sin
contar que en el 2017 el Havana Film Festival de Nueva York (HFFNY) le dedicó una retrospectiva con sus trabajos más exitosos, según la crónica de El Nuevo Herald.
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